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Arquitectos: J. Mayer H. Architects
- Año: 2024
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Fotografías:Frank Sperling

Descripción enviada por el equipo del proyecto. Estos lugares únicos no son solo refugios privados, sino también puentes entre el pasado y el presente. El edificio residencial oculto en el centro de la ciudad fue construido entre las décadas de 1960 y 1980 sobre los restos de una cochera dañada por la guerra, utilizando materiales de construcción encontrados y recuperados. El resultado es una fascinante variedad de diferencias de altura, niveles divididos y habitaciones con diseños diversos, todo ello producto de un proceso de reconstrucción gradual pero imaginativo.

La nueva intervención resalta la evolución única de la cochera, reforzando su estructura original mientras introduce una capa fresca y contemporánea a su rica historia. Las fachadas y el jardín permanecen en gran medida intactos, sutilmente realzados con plantas adicionales y complementados por esculturas contemporáneas y piezas de diseño que crean contrastes llamativos.


El concepto de fusionar objetos encontrados y seleccionados en el espacio exterior se extiende sin esfuerzo hacia el interior, evolucionando en una experiencia dinámica de vida urbano-cultural. Esta nueva vivienda se erige como una residencia única y personal, ofreciendo una rica y variada secuencia de habitaciones que generan una marcada sensación de lugar.

En el interior, todas las superficies fueron cuidadosamente retrabajadas para preservar su materialidad original e instalaciones técnicas, mientras se integraban perfectamente en un nuevo concepto monocromático de bloques de color. Esta meticulosa "renovación con pincel" aseguró que elementos clave, como barandillas, puertas, azulejos y interruptores de luz de fases de construcción anteriores, se conservaran en gran medida, añadiendo una capa de continuidad e historia al espacio.


Esta rara y singular situación habitacional en el corazón de Berlín, enclavada en una manzana urbana, ofrece un santuario urbano. Rodeada por un jardín silvestre, hogar de zorros, pequeños animales, aves e insectos, se ha convertido en un oasis tranquilo para una familia con tres hijos.
